martes, 21 de septiembre de 2010

Hace 30.000 años, ¿se extinguieron los neandertales?


El director del equipo que ha encontrado en la cova Foradà, en Oliva, el esqueleto de neandertal mejor conservado de España reflexiona en este artículo sobre el momento de su extinción

La opinión más estudiada es que sí. Que desaparecieron suplantados por los Sapiens Sapiens o Cromañones. Entre el año 40.000 y el 30.000 antes del nacimiento de nuestro Señor Jesucristo se produjeron varios singulares acontecimientos que marcan época en la evolución humana.

Es un período, 'mágico' podríamos decir, que ocasiona una 'revolución' total. Cambia todo. La tecnología, la antropología y la cultura. Hay, también, cambios medioambientales.

Los cambios tecnológicos son sustanciales. Más de doscientos mil años fabricando los mismos instrumentos para facilitar las actividades cotidianas, las del vivir diario, centradas en la caza y la recolección. A partir del 30.000 aparecen nuevas armas y herramientas, tanto en piedra como en hueso y asta. Frente a lascas, algún perforador, puntas y raederas, ahora hojas-cuchillo, raspadores, taladros-perforadores, buriles, piezas de armadura para instrumentos arrojadizos, puntas de hueso y asta, azagayas como puntas para venablos, varillas, punzones, agujas, agujas de coser, 'bastones de mando', propulsores, arpones, puntas de flecha, etcétera.

Aparece repentinamente el primer arte, es el Arte Paleolítico, el propio de Altamira para la zona cántabro-atlántica, y el propio de Parpalló para la zona mediterránea. Por vez primera, tras varios millones de años de evolución, el ser humano representa su cosmogonía, es decir, su visión del mundo, visión que nace ahora y se irá desarrollando hasta llegar a la cosmología o cosmovisión actual, tan rica, amplia, compleja y, por ello, tan limitada.

Son los animales, la fauna que le rodea y con la cual vive en plena simbiosis y que constituye el todo para el ser humano. Abrigo, alimentación, instrumentos, iluminación.

Provoca cambios en la fauna, en el medio animal que le rodea, y elimina a los leones de las cavernas, a las panteras, a los leopardos, a los osos, a las hienas, a los elefantes, a los monos; quedan toros-uros, caballos, cabras, lobos, zorros, etcétera, es decir, la fauna corriente, la actual.

Aparece una nueva especie humana, el Sapiens Sapiens o Cromañón, y lo hace de la noche a la mañana, porque durante esos doscientos mil años sólamente conocemos en toda Europa a Neandertales. Aquí empiezan los problemas. Se formuló una teoría explicativa que afirmaba: el Neandertal fue suplantado por el Cromañón procedente, ¡cómo no!, del continente africano.

Frente a los que pensaron que dicha suplantación fue violenta, por la fuerza, se pusieron los que pensaron en una extinción interna sin acción externa.

Para demostrarlo se adujeron explicaciones desde la genética, como degeneración por la endogamia; desde el medio, por falta de adaptación a nuevas circunstancias ambientales, los fríos extremos por ejemplo; desde la alimentación, dependiente de las proteínas animales; desde la tecnología, por ser superior la de los segundos; desde el carácter y la competencia por ser más agresivos y excluyentes los nuevos. Todo lo cual ha tenido suficiente contestación.

Los primeros análisis de ADN parecieron confirmar esta hipótesis y la más prestigiosa institución europea, el Instituto Max Planck de Leipzig (Alemania) fue su principal defensor.

En realidad la teoría, aunque hizo fortuna, se apoyaba en bases escasas y poco firmes, fundamentalmente procedentes del Próximo Oriente, de excavaciones antiguas que planteaban muchos problemas.

Los hallazgos posteriores, especialmente los españoles, Atapuerca sobre todo, amenazaban con dar un vuelco total a la teoría. Lo de Siberia, reciente, también; lo de Orce ayuda.

Los Sapiens Sapiens en Europa se encuentran a partir del 35/30.000, antes no hay ninguno. Coexistencia no hubo por lo tanto, la convivencia no fue posible, pues.

Del Antecessor y del Heidelbergensis de Atapuerca deben proceder los neandertales españoles.
En Australia, un grupo de investigadores, a partir de las suyas, investigan la extinción.

Nosotros, desde Valencia, postulamos una poligénesis y la no extinción de los neandertales por los sapiens sapiens invasores, para lo que buscamos pruebas a partir de nuestros propios hallazgos, esperamos poder confirmar lo que es una mera posibilidad. ¿Lo conseguiremos? Ya vorem.

Fuente: lasprovincias.es

domingo, 12 de septiembre de 2010

Los mamuts del hombre de Orce


Los trabajos de la nueva excavación comenzaron el 30 de agosto.- M. ZARZA

"Si los homínidos entraron en Europa por el sur el primer hombre no puede estar en Burgos", repitió una y otra vez en referencia a Atapuerca el paleoantropólogo catalán José Gibert, descubridor de los yacimientos de Orce. Las nuevas excavaciones, que comenzaron el pasado día 30 de agosto en el campamento de Fuente Nueva 3, empiezan a aclarar la importancia de su descubrimiento. "Hemos encontrado dos herramientas humanas con más de 1,3 millones de años de antigüedad que confirman que hubo presencia humana en aquel momento. Se trata de los más antiguos vestigios de presencia humana en Europa", explicó Robert Sala, director del proyecto que tiene permitido continuar con las investigaciones hasta el próximo 22 de septiembre.

Las dos herramientas de piedra eran utilizadas para cortar y fueron extraídas de un bloque de caliza. Se encontraban junto a restos de heces de hiena fosilizadas, lo que indica que los hombres y las hienas competían por la comida en el paraje.

"Se trata de un yacimiento muy importante. Llevaba cuatro años cubierto y en solo unos días hemos encontrado varios mamuts gigantes y uno infantil. Uno de los colmillos mide unos cuatro metros de largo y el mayor de los mamuts podía pesar más de 12 toneladas, lo que lo convierte en un animal más grande que los actuales elefantes", explicó Sala, que también ha trabajado en Atapuerca. Junto a los mamuts se han encontrado otros animales como un hipopótamo, un rinoceronte, ciervos de grandes dimensiones y hasta un caballo.

La acumulación podría deberse a que los animales acudían a beber al inmenso lago que existía en la zona durante el Plio-Pleistoceno, hace cinco millones de años, y quedaban allí atrapados.

Pese a la riqueza de los dos yacimientos en los que se trabaja, Robert Sala no comprende cómo no se autoriza a investigar en Venta Micena, el mayor de la zona, donde fue encontrado por Gibert el polémico Hombre de Orce. "Ese yacimiento es el más rico de toda Europa, de eso no hay duda, aunque no esté de acuerdo con la teoría de Gibert sobre aquel hueso", explicó el investigador.

La historia resulta sorprendente y para verla con perspectiva hay que tomar cierta distancia en el tiempo. En 1976 llegaba a Orce un paleoantropólogo catalán llamado José Gibert. Estaba convencido de que en aquel paraje, hace millones de años, debía haber habido un gran lago. Tras estudiar los diferentes estratos de la zona descubrió Venta Micena. Seis años después de este descubrimiento, Gibert encontró el resto humano que sería conocido como Hombre de Orce. Se trataba de un fragmento del cráneo de un niño que había permanecido en un nido de hienas. La comunidad científica no terminó de ponerse de acuerdo sobre el hallazgo. Gibert perseveró y pidió una y otra vez permiso para continuar las excavaciones en el yacimiento. Tantas como le fueron denegadas por la Junta de Andalucía. En 2007, el investigador falleció y sus cenizas fueron esparcidas en Venta Micena. Unos meses después, la prestigiosa revista Nature le daba la razón gracias a la continuación de su trabajo llevada a cabo por su hijo. El VM-0 era el trozo de un cráneo humano.

En la zona de Orce existen tres grandes yacimientos. Según los Gibert, el mayor es Venta Micena. Los otros dos debían ser más pequeños. Los mamuts y la industria lítica han sido encontrados en Barranco León y Fuente Nueva 3, que es donde se ha permitido excavar.

"La arqueóloga Sara Milliken, de la Universidad de Oxford, ha intentado junto a Luis Gibert conseguir permiso, pero la Junta se ha negado. No pueden alegar motivos económicos, porque el equipo se mostró dispuesto a conseguir la financiación por otro lado", explicó el alcalde de Orce, José Ramón Martínez (IU), que no entiende los motivos por los que no se autoriza a excavar en Venta Micena. "Es el yacimiento más denso del mundo. Al margen de si aquel hueso es de un hombre o no, que es algo muy importante, hay que tener en cuenta que se han excavado solo 300 metros cuadrados del millón de metros que tiene el yacimiento y de ahí Gibert sacó 16.000 fósiles, algo inaudito", aclaró.

El propio José Saramago, que bautizó como Pedro Orce a uno de los personajes de La balsa de piedra, se pronunció sobre Venta Micena en una de sus últimas visitas a Orce. "Unos yacimientos de la importancia de los de Orce merecen más sentido común. Los útiles allí encontrados no han podido llegar por el aire", dijo en referencia al cuestionado hombre de Orce, mostrado así su apoyo al desaparecido José Gibert. El tiempo se ha llevado al premio Nobel y al paleoantropólogo catalán, pero la tierra sigue en el mismo lugar esperando a que alguien le pregunte por sus secretos, siempre que medie un complicado permiso.

"Son ya 30 años de decir que no dan el permiso porque lo de Orce no es algo importante. La Junta de Andalucía sigue empeñada en decir que no a la apertura del yacimiento de Venta Micena porque cuando se abra se van a sonrojar muchos ex consejeros de Cultura y otros políticos que han ninguneado de forma escandalosa este proyecto", concluyó José Ramón Martínez.
Fuente: elpais.com

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Descubren que el canibalismo era habitual hace 800.000 años


El estudio paleontológico de los restos recogidos del yacimiento de Atapuerca (Burgos), ha permitido demostrar que el hombre practicaba el canibalismo de forma habitual hace 800.000 años.

La investigación, realizada por diversos miembros del Instituto Catalán de Paleoecogía Humana y Evolución Social (Iphes) y publicada en la revista Current Anthropology, parte del descubrimiento en las campañas arqueológicas de 1994 y 1996 de restos humanos de una nueva especie bautizada como 'Homo Antecesor'. El equipo científico observó entonces evidencias de prácticas antropofágicas en los huesos encontrados.

Lo que determina el nuevo descubrimiento es el canibalismo como práctica habitual, y lo hace teniendo en cuenta fósiles encontrados en 2003 en diversos subniveles del mismo yacimiento, pero de la misma antigüedad. "Nos encontramos ante el caso de canibalismo cultural más antiguo conocido hasta el momento", aseguran en la página web del Instituto.

Cortes con herramientas de piedra

El artículo, publicado bajo el título 'Cultural Cannibalism as Paleoeconomic System in the European Lower Pleistocene' explica que los huesos de un niño mostraban marcas de cortes practicados con herramientas líticas -de piedra-.

"El análisis de los restos craniales y postcraniales de Homo Antecesor ha permitido identificar diversas alteraciones de origen antrópico -marcas de cortes y fracturas de huesos-", ha afirmado Isabel Cáceres del Iphes.

La especialista ha añadido que "estos fósiles no muestran una distribución específica, ya que aparecen mezclados con instrumentos líticos y huesos de otros animales, como ciervos, caballos o rinocerontes. Ambos tipos de restos muestran modelos de provecho y patrones de carnicería similares".
Fuente: ecodiario.eleconomista.es

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Historia de un yacimiento malhadado El yacimiento granadino vuelve a estar en el mapa. Tuvo presencia humana hace 1,3 millones de años


Orce pudo ser en los años ochenta la cuna del hombre en Europa, pero el potencial del yacimiento quedó hundido por la polémica, porque el fragmento de cráneo fósil hallado en Venta Micena no acabó por convencer a la comunidad científica, dividida entre los que pensaban que era homínido y los que pensaban que no, que era de un équido.

Casi veinte años después, un nuevo equipo investigador, una nueva excavación y un nuevo proyecto hacen soñar otra vez con la resurrección del yacimiento paleolítico de Orce (Granada) como uno de los más importantes del mundo.

Los paleontólogos acaban de anunciar el hallazgo de varios restos óseos fosilizados de grandes mamíferos, elefantes, rinocerontes o hipopótamos, con evidentes huellas de haber sido consumidos por homínidos y también han recuperado industrias líticas muy primitivas, las primeras herramientas utilizadas por los homínidos. Tan primitivas que se comparan con las de los más antiguos yacimientos de Etiopía o Kenia.

No es la primera vez que esto ocurre en Orce —de hecho los huesos estaban medio excavados por campañas de hace años—, pero es importante el cambio de proyecto, responsables y objetivos. Atrás quedan las viejas polémicas por el famoso fragmento craneal del llamado «hombre de Orce» y la obsesión demostrada por su descubridor, Josep Gibert, por defender la humanidad del fósil, que acabó con divisiones y enfrentamientos entre sus discípulos y el declive de las investigaciones.

El nuevo equipo, comandado por el profesor Robert Sala, paleontólogo vinculado a Atapuerca, acaba de comenzar sus trabajos en la cuenca del Guadix-Baza y ya ha demostrado la presencia humana hace 1,3 millones de años.

También atrás queda la pugna por el fósil del «primer europeo». Atapuerca ha asombrado al mundo ya durante dos décadas y se ha consagrado como el yacimiento con la mayor colección de fósiles de homínidos, como demuestra el museo de la Evolución Humana recién inaugurado en Burgos.

Aún así, Robert Salas promete cierta competencia cuando indicó ayer a EFE que en la Sima del Elefante de Atapuerca la ocupación humana es de más corta duración mientras que en Orce los conjuntos de esa cronología «son mucho más extensos y dan idea de una ecología y adaptación diferente». La Junta andaluza financia el proyecto. La nueva campaña se prolongará hasta el 22 de septiembre, según la información del Institut Catalá de Paleoecología Humana i Evolució Social (IPHES), al que pertenece Sala. Los trabajos se centrarán en los yacimientos de Fuente Nueva 3 y Barranco León.

Los yacimientos han estado sin investigar durante los últimos años. Ahora, una vez reactivados y si logran el apoyo financiero necesario, y la suerte acompaña a los paleontólogos y se hallan los fósiles de los homínidos que ya sabemos que cazaban y comían hace más de un millón de años, es probable que Granada pueda mostrar al mundo un segundo tesoro, comparable a Atapuerca.

Junio de 1982

Josep Gibert anuncia el hallazgo en Venta Micena, cerca de Orce, de un fragmento craneal de homínido, entonces y según las primeras investigaciones, el más antiguo de Eurasia.

Mayo de 1984

El cráneo de la pesadilla
El Museo del Hombre de París afirma que se trata de un fósil equino. Gibert convirtió la refutación de esa acusación en obsesión hasta su muerte.

Verano 1993

El fósil en el laberinto
Gibert anuncia hallazgos y convoca un congreso internacional, a la postre incapaz de convencer al mundo, por su obsesión con el cráneo.

Agosto de 1996

El equipo se hace añicos
La polémica sigue al congreso e importantes científicos señalan un fraude. El equipo de Gibert salta en mil pedazos. En 2007 Gibert muere.

Septiembre de 2010

Atapuerca llega a Orce
El paleontólogo de Atapuerca Robert Sala dirige el nuevo equipo, dispuesto a investigar a fondo y poner Orce de nuevo en el mapa de la paleontología.

Fuente: ABC / Imagen: profeblog.es/blog