lunes, 30 de enero de 2012

Dejamos huellas genéticas al salir de África



Los primeros pasos que los humanos dimos fuera de África, nos llevaron, primero, a la actual Arabia, sostiene un reciente análisis genético conducido por la Universidad de Leeds, en el Reino Unido, y la de Porto, en Portugal. El equipo internacional incluyó científicos de Europa, Arabia y Norte de África.

El Homo sapiens moderno surgió en el Este de África, por donde hoy se encuentran Kenia y Etiopía. Desde ahí nos propagamos por todo el globo terráqueo. Faltan los detalles.

National Geographic con IBM han venido rastreando las huellas de la dispersión humana desde África al resto del mundo. En 2006 NatGeo hizo una extraordinaria serie de tv: The Journey of Man, dirigida por Spencer Wells. Una duda resuelta fue que no hubo diversos sitios en donde nos hiciéramos sapiens: todos los seres humanos hoy vivos compartimos a un solo ancestro, el Adán genético, que vivió hace apenas 60 mil años en el Este africano. El grupo inicial de cazadores-recolectores tuvo éxito en buena medida por la invención del lenguaje y la creación de lazos sociales. Pronto los nietos debieron colonizar nuevas tierras… y más… y más.

Esa colonización se dio hacia los cuatro puntos cardinales: al sur, rumbo a la punta de África; al oeste, hacia las selvas centrales; al norte, por el valle del Nilo, y al este cruzando el mar Rojo. “Un modelo popular predice que las etapas iniciales de la dispersión tuvieron lugar a través del mar Rojo hacia el sur de Arabia, pero la evidencia genética era escasa”, sostiene Luísa Pereira, de la Universidad de Porto, autora principal de la publicación.

El análisis genético de las vías para salir de África sería imposible si consideramos que cada humano recibe una combinación única de genes paternos y maternos. Pero los hombres tenemos una parte invariable del genoma: el cromosoma Y que heredamos de padre, abuelo… por vía únicamente masculina. Sólo cambia por mutaciones, errores de copiado, que son preciosas marcas para el biólogo molecular.

También tenemos, tanto hombres como mujeres, los pequeños organelos celulares llamados mitocondria, que tampoco entran en la lotería genética y se transmiten por línea materna a hombres y a mujeres. Que tengan su propio ADN lleva a suponer que alguna vez fueron células independientes que entraron en relación de ventajas mutuas con las células que forman nuestros tejidos, una simbiosis muy eficaz porque lleva millones de años.

Al no combinarse, también el genoma mitocondrial se hereda sin otros cambios que los errores de copiado, las mutaciones, que dejan rastro. El equipo analizó ADN mitocondrial y encontró evidencia de que el linaje más antiguo, no africano, estaba en Arabia, según publica este 26 de enero en el American Journal of Human Genetics. Comparó ADN mitocondrial de Arabia y el Cercano Oriente, con otros y encontró que nuestros primeros pasos fuera de África los dimos hacia Arabia.

El Genographic Project, de NatGeo e IBM, ofrece ahora una enorme base de datos para comparar mutaciones, tanto en el cromosoma Y como en ADN mitocondrial. Así es como se tiene la certeza de que los primeros humanos que salieron de África lo hicieron por el estrecho de Mandeb, donde termina el mar Rojo y comienza el océano Índico, pasaron por el llamado Cuerno de África (parece de rinoceronte) donde hoy están Somalia y Eritrea, hacia Yemen. El estrecho de Mandeb no tiene, donde más se angosta, sino escasos 30 kilómetros, y con una isla, Perim, por si algo faltara, que lo divide en dos canales. Es muy probable que estuvieran secos porque los glaciares, que cubrían buena parte del hemisferio norte, retenían el agua y el nivel de los océanos bajó.

El equipo, conducido por Martin Richards, de la Universidad Leeds, además de Pereira, analizó los linajes maternos y encontró evidencia genética de que al comenzar a extenderse la humanidad pasó, quizás a pie, hacia Arabia. “Tomados en conjunto, nuestros resultados sugieren que Arabia fue ciertamente el primer puesto de avanzada en la dispersión de los humanos modernos alrededor del mundo”, sostiene Richards.

El éxito evolutivo de los humanos, los llevó a extender sus territorios de cacería y recolección también hacia el norte, siguiendo el valle del Nilo. Eso ocurrió cuando ya las costas de la actual Arabia se iban poblando.

Usted puede participar con el Genographic Project donando 99.95 dólares. A cambio recibirá una caja con equipo para tomarse del interior de las mejillas una muestra de tejido, un sobre con el destinatario impreso, más el libro Deep Ancestry, de Spencer Wells, con todos los mapas de las vías por las que algún ancestro suyo salió de África y el DVD con los fascinantes programas de tv.

Entre a: https://genographic.nationalgeographic.com/genographic/index.html

Recibirá luego un mapa con el detalle de las mutaciones en su ADN que indican cómo salieron de África sus más remotos ancestros.

Maravillas y misterios de la física cuántica, Cal y Arena 2010.

Fuente: www.impreso.milenio.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario